Cuando subimos a lomos de Pegaso
el blanco corcel extendió sus alas
y la brisa que mueve los deseos,
con un soplo de aliento perfumado de albahaca
impulsó nuestros sueños hacia la ciudad encantada
Helio, el que da luz a nuestros corazones cansados
nos recibió engalanado con finas sedas de oro bordadas
que reflejaban los bellos colores de Eos*
en el amanecer de esta ciudad soñada
Nos bañamos con agua de jazmín y pétalos de rosas
Ungieron nuestros cuerpos con esencias perfumadas
y a la luz de la luna con el viento en sielencio
el caballo alado nos condujo
al lugar donde se forjan los sueños
Cruzamos los siete mares hasta llegar al Oasis Azul
en el desierto de la Diosa Atargatis*
Ahí, nos agasajaron con dátiles, leche de camella y miel
Y en la Jaima de las Ceremonias
sobre un lecho de lirios y madreselva
perfumado con aromas de azahar y canala
esparcimos nuestros sueños de Amor
Durante el éxtasis de este amanecer inventado
una lágrima furtiva se expandió por el lago del bosque
(donde se ocultan los sueños prohibidos)
Dushara, la reina de las sirenas
enternecida por la fuerza de nuestra Pasión
liberó del fondo del lago los anhelos mas profundos
y por un instante, un solo instante, tu y yo
formamos un todo en la inmensidad de este mar
Nuestros cuerpos... un aliento, un alma, un sueño...
*La Aurora
el blanco corcel extendió sus alas
y la brisa que mueve los deseos,
con un soplo de aliento perfumado de albahaca
impulsó nuestros sueños hacia la ciudad encantada
Helio, el que da luz a nuestros corazones cansados
nos recibió engalanado con finas sedas de oro bordadas
que reflejaban los bellos colores de Eos*
en el amanecer de esta ciudad soñada
Nos bañamos con agua de jazmín y pétalos de rosas
Ungieron nuestros cuerpos con esencias perfumadas
y a la luz de la luna con el viento en sielencio
el caballo alado nos condujo
al lugar donde se forjan los sueños
Cruzamos los siete mares hasta llegar al Oasis Azul
en el desierto de la Diosa Atargatis*
Ahí, nos agasajaron con dátiles, leche de camella y miel
Y en la Jaima de las Ceremonias
sobre un lecho de lirios y madreselva
perfumado con aromas de azahar y canala
esparcimos nuestros sueños de Amor
Durante el éxtasis de este amanecer inventado
una lágrima furtiva se expandió por el lago del bosque
(donde se ocultan los sueños prohibidos)
Dushara, la reina de las sirenas
enternecida por la fuerza de nuestra Pasión
liberó del fondo del lago los anhelos mas profundos
y por un instante, un solo instante, tu y yo
formamos un todo en la inmensidad de este mar
Nuestros cuerpos... un aliento, un alma, un sueño...
*La Aurora
*La diosa de la luna, protectora de la fecundidad y el amor
Eos representada en un cuadro titulado La Aurora (1881), del pintor francés William-Adolphe Bouguereau.
1 comentario:
Interesante viaje al estado de plenitud; allá donde el tiempo se detiene...
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