miércoles, 25 de julio de 2012

DE ACCIONES Y REACCIONES (SEGUNDA PARTE)

Continúo nadando por este mar salado buscando mi río de agua dulce. A veces en vez de sentirme "libre" por esta inmensidad, me percibo dentro de una pecera que flota a la deriva. Desde el cristal de mi reducido cubículo observo el habitad donde vivo. No quiero ser un pez que mira a través de esta mirilla; quiero ser partícipe de esta vida que bulle y se mueve a mi alrededor.

Encontré un mensaje en una botella y lo reenvíe a través de estas páginas. La vida es bella y continúa a pesar de los pesares. Hoy estoy más animada; mi estómago me dice, ojalá no se equivoque, que el marinero vendrá otra vez a rescatarme y me "parirá" nuevamente en este mar donde la libertad existe.

domingo, 15 de julio de 2012

UN PASEO POR LA VIDA

Recopilemos: Esta mañana una perdiz con sus polluelos se ha paseado por el jardín mientras desayunaba.  Un conejo regordete y gris, parecía un juguete de peluche, comía tranquilamente ajeno a sus compañeras de tránsito. Bleu, mi gato, está mucho más recuperado y cada día va creciendo en vitalidad y energía. Uno de los momentos más dulces es cuando gira la cabeza hacia un lado y me mira con sus ojillos felinos azul cielo.

Una amiga me ha mandado este mensaje al móvil: “Recuerda que, a veces, no conseguir lo que quieres es un maravilloso golpe de suerte”.

Mi entrañable amigo “Agus” desde su bonita y ahora "calurosa"  Sevilla, me ha comentado vía telefónica que soy demasiado “retrotraída” respecto a los hombres. Cada día entiendo menos a este “colectivo” de buscadores de “un- buen- polvo” de usar y tirar. No me importa ser tan “especial” ya que para ser feliz me basto y sobro conmigo misma.

De entre todo el estiércol que abona el mundo, casi siempre  suelo buscar y descubrir una hermosa y frágil margarita. Me mantengo informada de todo lo que está ocurriendo en el planeta o lo que nos quieren contar, claro está. Vivo en esta nave y soy partícipe de las crisis, guerras, finanzas. . . y toda la demás basura que nos asola. No soy tan lela ni tan bucólica.

Miau (Bleu), se ha enrroscado en mi regazo. Es la hora de la siesta (hora española que aquí sale el horario del pacífico no se porqué).  Esto, se está pareciendo  a una especie de “diario” (¡horror!). Mañana comienzo a transcribir mi “ensayo” de novela: “Las magas de Zahara”, que comencé a escribir hace unos siete años (los folios ya deben estar amarillentos) y tengo abandonada por ahí en cualquier carpeta.

sábado, 7 de julio de 2012

"MALAMAÑANA"

Es el nombre de un grupo de música flamenco/ alternativo/ reivindicativo. Pasamos un buen rato escuchándolos y participando de su actuación, jaleándolos y bailando en el “Duende”.

 Conil de la Frontera está muy animado en verano; magníficas playas y rincones con arte para perderse en las noches de luna llena. Pepa y yo, amigas desde la infancia, estamos de “descubrimiento. . .". Ha pasado, ¡tanto tiempo!, y sin embargo a pesar de la “patas de gallo”  en el fondo y  según en que ocasiones y acontecimientos, volvemos de nuevo a las risas, al entusiasmo y a una cierta inocencia, no perdida del todo, de nuestros años juveniles.

Todos los veranos pasamos unos días en Cádiz. El domingo participamos por primera vez en nuestras vidas del espectáculo de un partido de fútbol multitudinario. Gritamos como el más forofo de los forofos (¡España, España, España. . .!) y ganamos: CUATRO A CERO. ¡Campeones, campeones. . .!

La llegada de mi amiga y su hija; primer “susto”, Pepa casi atraviesa el cristal de la puerta del salón que comunica con el porche: “Y tu, ¿porqué tienes los cristales tan limpios?”. Te prometo y doy fe de ello que solo los limpio dos veces al año.

 Pasamos una mañana memorable en “buenos aires del sur” (Zahara de los Atunes), un largo y cálido baño en unas aguas transparentes y frías. Me sentí como una sirena o mejor dicho como “Selene” la reina de las sirenas. A mis amigas les encantó la tapa de atún, por algo las llevé a degustar la "tapa" que este año ha ganado el primer premio.

Por la tarde, continuamos nuestra aventura en Santa Lucía. Una vez más, nos sorprendió de nuevo la risa incontrolada de nuestra adolescencia. Íbamos por el camino  que conduce al acueducto (época árabe), una selva de vegetación. A mí se me “aflojó” la tripa e iba abriendo camino a base de torpedos (pedos) de difícil “sujeción” por más que traté de reprimirme.

Las playas de los “Caños de Meca” nos “eclipsaron”. ¡Qué maravilla!. Nosotras que no aguantamos un día completo de playa, resistimos como dos campeonas. La anécdota, nos pusimos a comer buscando una sombra bajo un acantilado con unos chicos totalmente “colgados” por el efecto del “chocolate”. Charlamos con ellos, uno de los chicos no dejaba de repetir: “somos normales, personas como las demás”, mientras  intentaba encender un fuego para calentar unas pizzas.

En Vejer de la Frontera  nos hicimos confidencias sobre un sueño que algún día haremos realidad. Para ellas es más que probable que lo vivan y no tarden demasiado. Yo confío en ello, mientras, canto este estribillo: “soñar que sueño”.  Las tres brindamos al calor de un cielo azul intenso con un sabroso y rico helado de distintos sabores y colores.  

Han sido unas jornadas intensas. Nuestro "encuentro" de verano un año más ha llegado a su fin. Seguiremos colgadas al teléfono contándonos nuestras cosas (somos confidentes la una de la otra),  y quién sabe. . . "lo mejor está aún por llegar. . ." Eso dice `Pepa.