y el sol
puliría de oro fino su gran sueño
verde y bermejo. (Arthur Rimbaud)
En el horizonte despejado de briznas y soles
una nube solitaria paraliza el silbido del viento
La inmobilidad de los espectros rompe
el sielencio dormido en el valle ausente
Las olas del naufragio no rugirán más
un susurro de sirenas varadas las ensordecerá
Debí partir hacia Ítaca antes del amanecer
cuando la madrugada se tiñe de lluvia
El arcoiris aguarda, y tras la noche espandirá los sueños
y el verde, de nuevo, sembrará de azul el cielo
Los dinosauros entonarán sus rezos...
2 comentarios:
En ocasiones, necesitamos el viento de levante que nos empuje hasta una playa desconocida, para poder ver otro nuevo amanecer.
Los espectros al menos tienen forma, son una entidad positiva o negativa según el caso....Pero hay seres que ni si quiera pueden alcanzar esa forma, ni siquiera se les puede relegar en un olvido infinito, porque significaría que hay un previo recuerdo...
Estos seres no merecen despedidas,ni perdones, ni desde luego condescendencias...porque simplemente no existen.
El tiempo, el karma o la justicia universal dará cuenta de ellos, de manera silenciosa e imperceptible, porque no alcanzan a merecer más.
Así pues, no caben las despedidas, solo una sonora y refulgente bienvenida a la libertad...Esa libertad que nos presta nuevos ojos, con los que ver una realidad llena de emoción y por supuesto alegría....
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