Hemos pasado siglos en el cubículo de transformación modelando nuestra metamorfosis.
Las alas han rasgado la fina entretela hasta romper el dique que nos permita soltar los viejos hábitos para aprender otros caminos, fluir por otros mares, descubrir nuevos océanos...
Permanecimos quietas (presentes y ausentes al mismo tiempo) mientras dirigían la batuta de nuestras vidas, a la espera (siempre a la espera) de que una nube de colores cruzara nuestro horizonte.
Las "quejas" y las "lamentaciones" las guardamos en saquitos de plata que hemos lanzada a la hoguera. La estela de un viejo velero arrastró mar adentro los restos del naufragio. No hay cenizas para esparcir en la arena ni sueños que borren las olas...
Sanadoras de nuestras heridas, alzamos el vuelo con nuevas alas de luz. Volamos alto, volamos erguidas, volamos ligeras sin dejar huellas, sin dejar rastro ni lastre. Libres, "ligeras de equipaje", libres...
Permanecimos quietas (presentes y ausentes al mismo tiempo) mientras dirigían la batuta de nuestras vidas, a la espera (siempre a la espera) de que una nube de colores cruzara nuestro horizonte.
Las "quejas" y las "lamentaciones" las guardamos en saquitos de plata que hemos lanzada a la hoguera. La estela de un viejo velero arrastró mar adentro los restos del naufragio. No hay cenizas para esparcir en la arena ni sueños que borren las olas...
Sanadoras de nuestras heridas, alzamos el vuelo con nuevas alas de luz. Volamos alto, volamos erguidas, volamos ligeras sin dejar huellas, sin dejar rastro ni lastre. Libres, "ligeras de equipaje", libres...
Imagen:Google |
1 comentario:
Ya sabes mi querida Mariangeles,que todo lo que escribes me gusta,porque sabes dejar sobre el papel,sentimientos muy bonitos.
Felicidades.
Besos.
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