miércoles, 22 de mayo de 2013

"REALISMO MÁGICO"

"Triptico"
Fotografía: Serezade
 El realismo mágico, es un género metalingüistico y literario de mediados del siglo  XX. No suscita emociones, las expresa. Es una actitud frente a la realidad.

Y en ello estaba, pensando que "esa" actitud era "invento" mío, cuando descubro que esta forma de vivir ciertos acontecimientos, los había expresado Garcia Marquez en una de sus novelas más representativa: "Cien años de Soledad".

En mi soledad inventada, existe un sinfín de micro mundos que se cuelan por todas mis rendijas sin previo aviso. Luego, hay otras realidades:

Realismo/Mágico/Virtual: a través del frío cristal del ordenador bailo con mi nieta Mar al ritmo de alguna canción de "Abba". Su risa y alegría (¡abela, abeja ), llenan de color, desde la otra orilla del Atlántico, mi pequeño microcosmo.

Realismo/Explícito/Expresivo: la declaración de amor vía teléfono de mi amiga más joven (podría ser mi hija pequeña). Zarandea todo mi universo, pone a todos los soles en su sitio, y a mí, en el centro sobre un trono de luz. Gracias por tus flores, Sofía. Ya se que él, no es celoso, y que me quiere casi tanto como tu.

Realismo/Real: una serpiente, no venenosa, corre/repta por el jardín en dirección opuesta a mí. ¡Que susto!. (¿Cuál de las dos sintió mayor pánico?).

Realismo mágico: ese "toque de canela" con el que trato de endulzar una realidad que a veces me desborda, otras, me abruma, me entristece o me produce melancolía; me sorprende y me regala una pequeña/gran alegría; hace que derrame lágrimas cuando el corazón se me encharca de amor. Canta, cuando el cielo se torna gris o me hace levitar cuando quieren aprisionar mi esencia o mi voluntad.

Y nunca es triste cuando la dicha es buena, al menos, no deberíamos permitirlo,  porque siempre, siempre, nos quedará "Abba". . .


domingo, 12 de mayo de 2013

LA VISIÓN DEL TIEMPO O TIEMPO DE ESPERA

Toda agua aspira a convertirse en vapor, a recuperar su esencia de agua. Marguerite Yourcenar

Hay ocasiones en la vida en que nos aferramos a ideas, hechos, creencias. . . a la espera de que ocurra "algo",  que a veces, suele ser una irrealidad "concreta", producto del lastre que vamos cargando y arrastrando a lo largo de los años. Años de frustración y "espera" vacía de contenido con la ilusa creencia de que las cosas van cambiar o se arreglarán por si solas con la barita mágica de la mano "divina".

Transcurrido el tiempo, "gran escultor", nos percatamos que debido a razones varias, nos hemos acomodado a una realidad lineal, difusa, opaca, que no deja transpirar y ahoga todas las expectativas de vida (de la realidad que hubiéramos querido vivir)  de los objetivos y las batallas que habríamos querido librar.

Cuando logramos abrir lo grilletes de las cadenas que nos aprisionan nos embriagamos de ciertos aires de libertad en busca del tiempo perdido. De nuevo caemos en la ilusa creencia de que el tiempo es recuperable. Vivir lo no vivido. . .  tiempo confuso de nuevo y otra vez a la espera de lo "irreal", o bien, entablamos una lucha feroz e incontrolada por quemar etapas, no vividas con anterioridad y que querríamos "atrapar" y lidiar a toda costa. Entonces, la frustración puede ser aún mayor.

Sentada en mi jardín estepario y reflexionando sobre los conceptos de vida, tiempo y muerte, del tren o trenes que sí  que pasan,  creo que el problema es que nos subimos al vagón equivocado, nos apeamos en la estación que no nos corresponde, o nos dejamos llevar a ver que pasa. . .  Ninguna de las opciones es la correcta. La vida, el timón de nuestra vida, es lo único que tenemos y deberíamos apretar con fuerza y sin titubeos para dirigir el rumbo, equivocado o no, de nuestro viaje por este paraíso (o infierno). De ti depende.




miércoles, 1 de mayo de 2013

CONTIGO EN LA DISTANCIA. . .



Imagen: Google


¿Eres tú?, dime, ¿realmente eres tú?. Hoy, casualmente, mientras navegaba por Internet, buscando una información determinada, he encontrado "algo" tuyo que me ha producido una inmensa ternura. Mi primera reacción ha sido marcar tu número de teléfono. Antes de hacerlo, he respirado hasta diez veces, ya sabes lo impulsiva que soy. Seguramente esta llamada no hubiera tenido respuesta y entonces se habría roto toda la magia del momento.

El pequeño universo que nos habita es sorprenderte. Está lleno de mundos desconocidos, incluso para nosotros mismos. De galaxias en fase de expansión, de novas y super novas, de agujeros negros y hermosas constelaciones aún por descubrir.

De entre estos mil "yo" que somos, sobresale el que nos gusta mostrar y exponer para lograr nuestros objetivos: que no quieran, nos amen, nos admiren, nos envidien, nos odien, empaticen con nosotros o nos "antipaticen". . . también hay otra lucha, una lucha interna con nuestras convicciones, creencias, sentimientos, valores. . . ante otra realidad que querríamos vivir o hemos vivido ya en este ir y venir, avanzar y retroceder, sintiendo determinados impulsos y determinadas reservas en un "pulso" continuo con otros seres que componen nuestro "ser".

Hoy es primero de Mayo, una fecha muy significativa. Seguramente tu y yo, estaríamos en manifestaciones distintas y opuestas, y a pesar de ello, extendería mis brazos para abrazarte desde la distancia. Tú, tu "otro" yo, seguramente me negaría. . . sin embargo y a pesar de ello no somos tan diferentes. Sólo hay una verdad, quizás la única "real" y es que los sentimientos, las emociones, no se pueden medir.

Somos "especiales" y no podemos "enterrarnos en una fosa común".  Dos extraños, viajeros de una misma nave que un día se encontraron y  unieron sus sueños para vivir un sueño. . .